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jueves, 24 de febrero de 2011

miércoles, 23 de febrero de 2011

BUENOS O MALOS



Si analizas e investigas por qué aceptas con gusto a unas personas y rechazas a otras, verás con sorpresa que casi siempre responde a que unas personas te sirven para formar o mantener el personaje que te has propuesto de ti mismo y otras te lo impiden o molestan.

A quienes van a tu favor, los llamas buenos y a quienes te contradicen, los consideras malos.

Es ésa una señal de infantilismo interior. El ego infantil es un mal consejero para tratar y relacionarse con los demás. Si no se supera, es imposible mantener unas buenas relaciones humanas. La vanidad del ego nos lleva también a ser injustos con quienes por ser honestos, no reafirman nuestra personalidad.


Darío Lostado
(Mensajes De Realización)


lunes, 21 de febrero de 2011

CULPAR A LOS DEMÁS


En tu mente revolotea en cada momento la idea de creer que tus allegados, tus amigos y las circunstancias de tu vida son los culpables de los males que te aquejan.
Mientras te sigas engañando a ti mismo y achaques y repartas las culpabilidades de lo que te ocurre a los demás, estarás dando la espalda a la verdad. Y, fuera de la verdad no encontrarás jamás paz en tu corazón.


Cuando culpas a los demás de lo que te ocurre, estás depositando el control de tu vida en sus manos.
En la dirección de tu vida tú eres más importante que todos los demás y que todas las circunstancias que te acompañan. Ponlo en práctica.



Darío Lostado
(Mensajes Para Elevar La Conciencia)


sábado, 19 de febrero de 2011

AMOR A LAS COSAS



Aunque normalmente cuando hablamos del amor nos referimos al amor entre personas, hemos de aceptar que nuestra existencia está llena de otros muchos amores, el amor a muchas cosas.

Hemos dicho que el concepto del amor más corriente y aceptado es o consiste en la atracción o inclinación hacia algo que aparece como apetecible y deseable.

Todos conocemos personas que sacrifican hasta su propia salud o la vida misma por conseguir o mantener ciertas cosas que aman, apetecen o desean.

Recuerdo aquella señora que cada mañana del dura invierno yo veía, cuando marchaba a mis clases, lavando su sencillo y utilitario coche que tenía siempre aparcado delante de su casa. Aquella señora amaba su coche.

Conocí una señora ya anciana, con achaques serios de salud a quien el médico le había recetado unas píldoras que debía tomar diariamente. Cada día tomaba en la mano una de aquellas pildoritas mirando a sus hijos con cara de pena al mismo tiempo que a la píldora que tenía en sus manos y les decía con tono de lástima: ¡Ay, qué ruina!, mirad, ¡quince pesetas! (unos quince centavos de dólar).

Aquellas píldoras con seguridad le hacían más daño que provecho, por el dolor y tristeza que le causaba el gastar quince pesetas en cada una. Ella amaba el dinero más que su propia salud.

Todos conocemos algunas personas que exponen su salud por ganar más y más dinero. O personas que están tan apegadas a sus cosas que son capaces de sacrificar hasta lo más valioso por ellas.

Ese deseo, esa atracción o dependencia de las cosas suele llamarse amor.

Digamos ya desde ahora, que hasta esa clase de amor es en sí mismo positiva. Sí. Incluso el amor del avaro a su dinero es en sí mismo positivo y bueno en cuanto expresión de una energía hacia algo.

Todo acto de voluntad o energía es positiva. Aunque sea incorrecta la actitud o dirección de quien dirige esa energía hacia unos fines no correctos o inadecuados.

La energía en sí misma es buena.


Lo que la puede convertir y de hecho la convierte en negativa o destructiva es la dirección o intencionalidad del deseo y la ignorancia o falta de conciencia en la jerarquización de los valores, puesto que muchas veces un valor inferior se absolutiza y de ello se siguen más efectos negativos que positivos.

Oímos a veces hablar con demasiada frivolidad y ligereza que el amor al dinero o tal o cual cosa es malo.

En realidad no hay amor malo, sino actitudes malas, erróneas o incorrectas.

Hay que repetir una y otra vez que las cosas, los objetos, el mundo no es malo.

Puede haber y de hecho lo hay, un mal uso de las cosas o del mundo. Pero todo cuanto existe es en sí mismo bueno.

Podemos aclararlo con un simple ejemplo. Sabemos que el rayo láser sirve para infinidades de usos positivos y hasta para sanar enfermedades y salvar vidas. Ese mismo rayo láser dirigido para matar se convierte en malo o destructivo. No es él malo sino la dirección que se le da.

Lo mismo podríamos decir de la energía atómica y tantas otras cosas más.

Las cosas son buenas. Por tanto, amarlas también lo será.

Pero el amar las cosas como si fueran el objetivo último de tus acciones y tu vida, en lugar de usarlas como medio e instrumento para un fin superior es lo que constituye el deseo de ellas en incorrecto o malo.

Dios puede y debe ser amado en todo lo existente y visible.

Pero amar el medio, las cosas, y quedarse encadenado en ellas impidiéndote conseguir llegar al fín para el que están destinadas puede convertir su uso, apego o amor en incorrecto o mal porque lo que era un medio se ha convertido en fin.

Todas las cosas son buenas cuando se usan para lo que han sido hechas y tú las posees sin que ellas te posean a ti.

Quien vive apegado y encadenado a las cosas, se inutiliza para amar.


Darío Lostado
(Somos Amor)


jueves, 17 de febrero de 2011

APERTURA Y COMPRENSIÓN


Mientras no tengamos una apertura total,
una comprensión siempre disponible,
no lograremos estar en paz
con el mundo que nos rodea.


Darío Lostado
(Ama Y Haz Lo Que Quieras)


Photo by Guillem.


lunes, 14 de febrero de 2011

EL SUEÑO DE LA MARIPOSA


Se cuenta que el maestro chino Chuang Tsé, tuvo una noche un sueño.
Soñaba que era una mariposa que volaba de flor en flor.
Era feliz volando por el campo entre las flores.
A la mañana siguiente sus discípulos lo encontraron triste y pensativo.
Le preguntaron: ¿Qué le pasa, maestro?
Y él respondió: Estoy muy preocupado, tengo un grave problema.
Esta noche he soñado que era una mariposa. Estoy preocupado.
Los discípulos le replicaron: Eso fue un sueño.
¿Por qué va a preocuparle el soñar que era una mariposa?
Ese es mi gran problema, dijo Chuang Tsé.
Ahora no sé si Chuang Tsé soñó que era una mariposa o si una mariposa que está posada sobre una flor está soñando que ella es Chuang Tsé.


Los sueños nocturnos son sueños dentro de otro sueño que nos aparece más real. Pero sueño, al fin.
El Poeta no puso en boca del príncipe solitario solamente como recurso poético aquellas palabras de "que toda la vida es sueño y los sueños, sueños son". Eso no es sólo poesía.

Casi todos hemos tenido en algún momento y algunos bastante frecuentemente, la sensación de no saber en un momento determinado si estamos viviendo algo real o algo imaginario. Es como si se sintiera que lo que estamos viviendo en ese momento es ilusorio. Este sueño que soñamos parece real. A veces resulta triste y doloroso. Otras agradable y dulce.

Tal como vivimos, ¿Vivimos la realidad o vivimos un sueño?


Darío Lostado
(Vivir Como Persona)


sábado, 12 de febrero de 2011

LOS 10 PRINCIPIOS PARA ALCANZAR LA FELICIDAD.


l.- Nadie va a darme la felicidad, sólo yo puedo conseguirla.

En este primer pensamiento, el ser humano toma la responsabilidad de su vida e inicia una búsqueda y un esfuerzo por encontrar eso que tanto busca.

2.- Yo soy un ser único en toda la tierra, nadie me comprende mejor que yo, y nadie sabe lo que yo necesito mejor que yo.

En este segundo principio se dan las bases para eliminar cualquier ofensa que las personas reciban de parte de otras; cualquier comentario que deprima a una persona podrá ser nulificado bajo este principio, ya que la persona reconoce que nadie puede opinar acerca de ella, puesto que nadie la conoce mejor que ella misma.

3.- Lo que recibo ahora es lo que sembré ayer, y lo que siembre ahora será lo que reciba mañana.

Este tercer principio permite al ser humano reconocer que los problemas actuales son resultado de acciones incorrectas del pasado, pero que, por lo mismo, el momento presente es el indicado para ir sembrando un futuro.

4.- Ni el pasado ni el futuro pueden lastimarme, sólo el presente tiene valor en mi vida.

Entendiendo este cuarto principio, la persona le dará todo el valor que tiene su momento presente y le restará importancia a los hechos pasados que le causan remordimientos, y a los hechos futuros que le causan angustia.

5.- Sólo yo decido lo que debo hacer en este momento.

Es decir, el ser humano entiende que las influencias ajenas son tan sólo eso, influencias, y él es el único que puede decidir qué hacer en ese instante.

6.- Sólo en el amor y en la paz interior puedo tomar las decisiones correctas.

Es decir, si hemos de actuar en el tiempo presente, tendremos que hacerlo en paz y con amor, pues de esta manera, las acciones que tomemos estarán inspiradas en nuestra más alta capacidad tanto de servicio como de inteligencia.

7.- En mis decisiones tomaré siempre en cuenta el beneficio de los demás.

Es decir, tomaré aquellas decisiones que beneficien a la mayor cantidad de personas; de esta forma, mi vida se estará encaminando hacia la más alta gloria que es la de recibir la compensación por el servicio prestado a los demás.

8.- Mi cara es el reflejo de mi estado interior.

Es decir, cuidemos siempre el aspecto de nuestro rostro, adornémoslo siempre con la sonrisa, y que los ojos se encuentren siempre prestos a mandar una mirada de amor, porque de esta forma estaremos reflejando la serena armonía de quien ha aprendido a caminar en el sendero de la felicidad.

9.- Soy una persona al servicio de la humanidad.

Es decir, todo lo que yo haga, todo lo que yo diga, todo lo que yo piense o sienta, servirá para gloria de la humanidad, o bien, para perdición de ella.

10.- Yo tengo una misión en la vida, ser feliz y hacer feliz a los demás.

Este último principio da sentido a nuestra existencia, y, a la vez, orienta nuestros esfuerzos hacia el beneficio de toda la humanidad.


Si cada uno, desde el lugar y tiempo en que nos ha tocado existir lograramos seguir estos principios, aplicarlos en nuestra propia vida y difundir esta enseñanza tan valiosa, todos podremos alcanzar la Felicidad, entendida esta como la PAZ Y ARMONIA ESPIRITUAL. Que logren hacerlos propios y compartirlo.





Maestra Kwan Yin




Nota: Muchísimas gracias a Edith R.


martes, 8 de febrero de 2011

¡GRACIAS A LA VIDA!


¿Piensas alguna vez en la felicidad que es para ti el tener los ojos para ver, los pies para caminar, los oídos para oír, la capacidad de entender y conocer..., cuando hay tantas personas que no ven, no oyen o no pueden moverse por sí mismas o no tienen la capacidad normal de conocer?

¿Cuántas veces has agradecido a La Vida o Dios estos dones que tienes y quizás usas indebidamente o no los empleas para lo que La Vida o Dios te los dio?


Con alegría profunda y sincero agradecimiento, dirígete a esa Inteligencia Infinita que gobierna el Universo y sé feliz con LO QUE ERES.


Darío Lostado
(Mensajes De Alegría)


domingo, 6 de febrero de 2011

SER UNO MISMO


Cada uno tiene una idea y un juicio sobre sí mismo. Pero la idea que muchos tienen sobre sí, se la han formado en gran parte, por la idea o el concepto que los demás tienen sobre ellos.
Si son alabados, aplaudidos y elogiados, se forman una alta idea sobre sí mismos. Si por el contrario, son menospreciados, olvidados y criticados, llegan a pensar que valen poco. Es decir que su valía, su importancia está dependiendo del juicio cambiante y voluble de los demás. El aprecio que tienen de sí mismos fluctúa y está en función del aprecio que les tengan los demás.

Pero mi voz me dice:

Si fueras consciente de lo que eres en ti mismo y por ti mismo, los juicios de los demás los verías como lo que son: simples y parciales apreciaciones personales.
Tú no eres ni lo que piensan los demás, ni siquiera lo que tú piensas que eres.
Cuando te sientes mal porque los demás te ven mal es señal que no estás viviendo por ti sino por el juicio de los otros. Eso es vivir alienado, extraño a ti mismo.


Tú puedes verte y sentirte por ti mismo. No te veas y te sientas por lo que los demás ven y sienten de ti.
¿Cómo es posible que en tantas cosas quieras ser primero y antes que los demás y en el conocimiento de ti mismo, vayas a remolque de todos ellos?
Ten presente que eres en el fondo de ti mismo mucho más de lo que crees que eres y también más de lo que los otros creen. Cuando te identifiques con tu verdadera realidad, lo sentirás por ti mismo y te sentirás feliz sin orgullo y sin comparación con nadie. Porque sabrás que los otros también son como tú.


Darío Lostado
(...Pero Mi Voz Me Dice...)


jueves, 3 de febrero de 2011

EQUIS Y LOS NOMBRES


No quiso ponerse nombre. El era simplemente X. Y es que X no tenía muy claro para qué servían los nombres.
Sabía X que la gente, que cada persona, quiere ser nombrada por su nombre.
Sabía que los hombres se matan por defender y engrandecer su nombre.
Sabía que muchos se esfuerzan constante y afanosamente en que sus nombres aparezcan en periódicos, revistas y medios de comunicación.
Sabía que muchos se afanan por perpetuar su nombre en inscripciones, placas monumentos...
Sabía que la mayoría de los hombres se sienten ofendidos cuando menosprecian su nombre.
Sabía que casi todos los hombres quieren que su nombres sean traídos y llevados en la bandeja de la alabanzas.
Sabía que muchos sufren y se enojan cuando su nombre no aparece en la relación de alguna fiesta.
Sabía que casi todos sienten un orgullo inconfesado por su nombre.
Sabía que muchos se pavonean con su nombre acompañado de un apellido conocido aristocrático.
Sabía que muchos se alimentan de nombres y palabras.
Sabía que los nombres significan y representan una realidad profunda y otra superficial.
Sabía que casi todos se preocupan mucho de sus nombres y poco de la realidad que representan.
Sabía que para la mayoría, sus nombres sólo representan la realidad más superficial, que apenas es real.


Por eso, y por muchas razones más, él no tenía nombre.
Pero era consciente de lo que era.
Amaba con lo que él era.
Equis sabía que él valía, no por su nombre, sino por lo que él era, fuera su nombre conocido o desconocido, alabado o vituperado, nombrado o innominado. Por eso, ¿para qué necesitaba nombre?


Darío Lostado
(Ama Y Haz Lo Que Quieras)