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jueves, 30 de diciembre de 2010

NUESTRA EVOLUCIÓN



La Humanidad ha pasado desde su origen por varias etapas de desarrollo. Después de la prehistórica, aparecen la histórica, la social, la tecnológica, la industrial, la científica y últimamente la informática.

La evolución espiritual, de una u otra forma, ha estado siempre presente en todas las etapas de la historia humana.

Los pasos de esta evolución son cada vez más rápidos y acelerados. Pero todos ellos han sido útiles y necesarios.

La conciencia humana ha ido abriéndose y expandiéndose, aunque esa expansión haya sido notoria en muy pocos seres humanos.

Todos los seres son una manifestación del Ser y al mismo tiempo, son el Ser mismo, que es la base y fundamento de todos los seres.

Todos hemos tenido atisbos de visión de nuestro ser, aunque algunos apenas se hayan dado cuenta de ello. Estas señales o vislumbres suelen ser tan rápidas e instantáneas que apenas dejan un imperceptible signo o recuerdo, que desaparece inmediatamente.

Cuando el hombre se da cuenta de que él es más de lo que está viviendo, surge en él un deseo de realizar el camino que lo lleve a ese estado de conciencia que intuye que puede alcanzar.

Eso es el camino de su realización, que en el fondo no es sino una clarificación de la mente por una visión directa de la realidad, que en definitiva no es sino un estado elevado o superior de conciencia.



El ser humano ha de ir dándose cuenta de que frente a todos los fenómenos cambiantes que observa en la naturaleza, existe uno, algo o alguien que atestigua lo que ve y es el observador de todos los cambios. Eso es la conciencia de sí. El Ser, La Presencia.

Cuando llegamos a conocer esta Presencia, El Ser, el Yo eterno y absoluto, nos damos cuenta de que esa es la experiencia totalmente liberadora y realizadora humana. Ese es un estado en el que los deseos, temores, dudas, inquietudes... desaparecen.

Ese es el auténtico estado original de la conciencia humana. Pero fue distorsionado por la idea errónea de creerse un ser distinto del Ser absoluto o La Presencia.

A ese momento errático de la mente se lo llamó "pecado original". Es el error primero que da origen a los demás errores.

Lo llamo error porque la palabra griega del cristianismo antiguo, con que se referían al pecado, era el término "amartanó". Que significa errar el blanco, o sea, equivocarse.

Es evidente que una equivocación no puede conllevar el peso moral de culpabilidad que siempre se la ha dado a la palabra pecado. Por tanto, en el hombre hay un error original y errores posteriores originados, pero no culpabilidad. Quien se equivoca, ya tiene su propia pena en su equivocación. ¿Por qué hemos de cargarle encima con una culpabilidad digna de castigo? En su error o equivocación, ya lleva incluida su pena.

Sólo existe un mal: el olvido o ignorancia de nuestra Presencia.

Nos hablan constantemente de aquello que debemos llegar a ser, cuando en realidad ya somos aquello que intentamos o deseamos ser: libres y felices.

El llegar a darnos cuenta de esto que estamos diciendo pareciera que fuese un camino largo y penoso. En realidad, la meta ya está en el camino. Camino y meta son lo mismo.

La luz está ahí, siempre. Sólo hace falta que yo abra los ojos.

Se trata de estar alerta y atento internamente, pero sin esfuerzo.

Estar atento significa estar aquí y ahora presente a mí mismo, que soy la Realidad que crea lo que aparece en mi conciencia.

Lo más perfecto y en apariencia complicado se reduce a lo más simple.

Quedarnos admirados ante la maravilla de una computadora, con tantos conocimientos almacenados. Y los técnicos nos dicen que todo se basa en la operación matemática de agrupar ceros y unos, operación que puede realizar el niño en su desarrollo más elemental.

Estar alerta es ser consciente de que toda la realidad está aquí y ahora.

La conciencia observa que todo cambia. La presencia del observador es lo único permanente e invariable. Eso eres tú como conciencia.

Ese estado de conciencia, de observación pura, es lo único que hemos de descubrir. No hace falta nada más.


Darío Lostado
(Atrévete A Ser Libre)

martes, 28 de diciembre de 2010

LO QUE ERES


Tu vocación como persona, no es triunfar en los negocios, sobresalir en la vida social, tener éxito y obtener aplausos y alabanzas, o tener un cuerpo fuerte o bello...

Tu vocación y misión como persona es llegar a vivir el ser esencial, la Realidad que tú eres y hacer realidad en tu existencia temporal todas las capacidades y potencialidades que tienes en tu naturaleza.


Como ser consciente, has de darte cuenta de lo que ya eres, sin necesidad de fantasear con lo que aspiras a ser.

Cuando intuyas o veas LO QUE ERES, a muchos de tus deseos y proyectos los verás insignificantes y triviales y tu corazón rebosará de gozo por tu plenitud.


Darío Lostado
(Mensajes de realidad)


domingo, 26 de diciembre de 2010

DESPERTAR A LA REALIDAD


Me decía alguien: Tú hablas de cosas elevadas, abstractas y teóricas, pero la realidad de la vida diaria está ahí, en los hechos de cada día...

Le contesté: Mientras tú consideres que los hechos de cada día son la realidad, andarás en el error. Tú quieres solucionar los problemas de tu sueño siguiendo en el sueño. Y yo te aconsejo que salgas de él y despiertes. Al despertar, todos los problemas de tus sueños, que creías reales, se habrán solucionado. O mejor dicho, te darás cuenta de que nunca existieron. Yo sólo hablo para quienes quieren despertar y no para quienes desean seguir en su sueño.


¿Te resulta difícil aceptar que lo de cada día no es la realidad sino que ésta es ALGO muy distinto? Medita y lo verás.


Darío Lostado
(Mensajes De Amor)


viernes, 24 de diciembre de 2010

MENSAJE NAVIDEÑO DE DARÍO LOSTADO


Queridos amig@s:
Darío nos envía desde Argentina, su mensaje de paz y amor para esta Navidad.



Amigos:
Ante Las Fiestas de Navidad deseo expresaros mi deseo profundo que seáis muy felices no porque lo que hay fuera de vosotros sino por La Felicidad que ya sois en el fondo de vosotros mismos.
Recordad que La Divinidad vive en cada uno de nosotros sin excepción. Y esa Divinidad es plenitud de amor, de Lucidez , alegría y gozo auténtico y Paz permanente. Mi deseo es que viváis ESO cada instante porque solo vivimos de instante en instante. No esperéis a "mañana" para sentirlo y vivirlo. Es en ese momento que vivís.Estad atentos a ello en cada momento. Yo desde aquí a 10.000 kilómetros me siento en unión con todos vosotros.
Os deseo Paz viva y profunda.
Un abrazo

Darío Lostado

jueves, 23 de diciembre de 2010

FELICIDAD


El deseo de felicidad es innato y universal. Todos queremos y ansiamos ser felices:

1. Porque no vivimos lo felices que quisiéramos.

2. Porque todos sentimos en el fondo de nosotros mismos que podemos y estamos llamados a una felicidad plena.




Si no tuviéramos la capacidad y posibilidad de serlo jamás sentiríamos ese anhelo tan profundo e insistente de felicidad...
Cuanto más cerca vislumbramos la luz más ansiamos estar en ella.
Nuestra felicidad es la Luz irradiante amorosa que está pidiendo y exigiendo inundarnos y expresarse en nuestra existencia, porque no hay felicidad humana sin un profundo amor generoso y efectivo. Nadie será jamás feliz, si su vida no es expresión de amor vivo e irradiante.


Darío Lostado
(Mensajes de Amor)



martes, 21 de diciembre de 2010

VERDAD


¿QUÉ ES LA VERDAD?

Esta indagación y búsqueda es y ha sido siempre uno de los interrogantes más esenciales de la historia de la Humanidad.


Metafísicamente, Verdad es LO QUE ES, ES LA REALIDAD.

Suele llamarse verdad moral a la adecuación de lo que se piensa con lo que se dice.

Nada de lo que se dice o se piensa es la verdad. Eso son sólo palabras e ideas.

Las palabras únicamente son signos o símbolos de la realidad.

La Verdad ES. Se intuye o vive pero es inexpresable. Expresarla en palabras es sólo eso, expresión verbal pero no La Verdad.

¿Qué nos toca hacer? Tener el anhelo de corazón, te das cuenta que tú eres La Verdad. No tus apariencias físicas sino tu ser íntimo. Ahí está la paz y el descanso.


Darío Lostado
(Mensajes De Verdad)


domingo, 19 de diciembre de 2010

¿TENER LA RAZÓN?


Se oye con frecuencia decir: No tienes razón.
Quién así se expresa, con seguridad él tampoco tiene la razón. Si se hermanara con el otro y mirara desde su ángulo y punto de vista, seguro vería que el otro tiene algo de razón.
No te adjudiques nunca La Verdad, que es infinita e inabarcable. Conténtate con ver la verdad que puedes ver, admitiendo los otros ángulos infinitos que desconoces. Cuanto más amplíes tu conciencia, serás feliz con lo que tú vas descubriendo de La Verdad.


Darío Lostado
(Mensajes De Alegría)

jueves, 16 de diciembre de 2010

EL ÁGUILA Y SU REFLEXIÓN


Un águila planea apacible y majestuosamente por las alturas cuando apareció una compañera de correrías, agitada y temblándole todavía las alas por el susto.

Oye, le dijo, he visto pasar por encima de mí una tremenda águila que rugía. No movía las alas y quemaba el viento por donde pasaba.

¡Ah! Sí, contestó tranquila y serenamente su interlocutora. Son esos pobres animales humanos que antes se arrastraban por la tierra con máquinas metálicas y ahora han aprendido de nosotras y les han puesto alas para volar.

Dicen que son inteligentes pero tratan de imitarnos en todo. Inventan cosas y más cosas metálicas. Pero casi siempre son para destruir.

He oído, contestó la compañera, que están intentando hacerse nidos más altos que las montañas donde tenemos los nuestros. Cerca del ojo de la Gran Águila.




No te preocupes, le dijo el águila más serena. Los pobres hombres han ido destruyendo poco a poco el planeta donde la Madre Común los puso. Pero el orgullo y la ambición que los domina, hacen que fracasen en todos sus intentos.

Se cuenta que son los animales más queridos de la Gran Madre Águila. Pero parece que ellos no se dan cuenta y no son mejores que esos roedores y culebras que nos sirven de banquete cada día.

Se matan entre ellos sin necesidad alguna. Hay algunos entre ellos, más sensatos, pero a esos los llaman locos ilusos.


Darío Lostado
(Somos Amor)



lunes, 13 de diciembre de 2010

EL AUTENTICO AMOR


El amor sólo se comunica amando.
Sólo quien ama puede enseñar con eficacia a amar.
Amar significa sentirse Uno con quien es La Vida de mi vida y en Él, sentir que el mundo entero vive también en mí.
El amor más perfecto es amar el Amor.
Amar así es no sentir a los demás como otros, sino sentirlos como yo, porque yo soy Él y en Él están todos y todo cuanto existe.


Las diversas etapas por las que pasa la persona en su desarrollo personal deben apuntar siempre hacia un mayor y más consciente desarrollo de la infinita capacidad amorosa que somos. Ese es el mejor crecimiento humano.
Es conveniente que cada uno de nosotros examinemos con sinceridad y honestidad la rectitud y calidad de nuestro amor.


Darío Lostado
(Mensajes De Amor)


sábado, 11 de diciembre de 2010

¿PERDONAR O COMPRENDER?


No perdona quien no olvida la ofensa.
El ego de toda personalidad no puede amar, porque su esencia es ser centro de toda su existencia.
Mientras amemos desde nuestro ego, por más emoción o sentimentalismo que parezca haber en el amor, será tambaleante porque no tiene profundidad.



Quienes dicen que perdonan pero no olvidan, son un ejemplo claro de esta clase de amor engañoso del ego. En verdad, cuando amamos de veras, ni siguiera llegamos a sentirnos enojados porque el amor auténtico es ante todo comprensivo y ve que toda ofensa del otro proviene siempre de su ignorancia y no de la maldad. Sólo hay que comprenderlo.


Darío Lostado
(Mensajes De Amor)


jueves, 9 de diciembre de 2010

VERDADERA PERSONALIDAD


Parece una paradoja. Muchos piensan que hay que trabajar mucho para conseguir un gran carácter, una personalidad desarrollada...
Y es justamente lo contrario. Cuando me despreocupo de mi personalidad y me ocupo de ser auténticamente Yo, mi Yo verdadero y real -que no es el de mi personalidad-, mi carácter y mi personalidad son la expresión natural y espontánea de la sencilla fortaleza de mi verdadero ser, y sobrepasa todas mis expectativas de lo que deseaba conseguir para mejorar mi personalidad.
Cuanto más auténticamente soy Yo, en mi Yo verdadero, menos he de preocuparme por desarrollar mi personalidad. Ésta va apareciendo sola, alimentada de la plenitud de mi ser.
Es cierto que esa personalidad natural y auténtica choca con ciertas formas y convencionalismos sociales que sólo buscan quedar bien, someterse y acomodarse a las imposiciones de la colectividad.
Quien desee conseguir una fuerte y desarrollada personalidad debe identificarse plenamente con su Verdadero Ser, su Yo Real y profundo, del que se originará la personalidad más adecuada.




Darío Lostado
(Despertar A La Conciencia Día A Día)


domingo, 5 de diciembre de 2010

LA HONESTIDAD DEL AMOR




Se gasta mucho tiempo, dinero y esfuerzo en terapias, consejeros y analistas para solucionar los problemas de las parejas y, en general, los conflictos de las relaciones humanas.

Casi todos estos problemas y conflictos tienen una única y común causa y raíz: un deficiente y falso amor.

¿Por qué no analizar a fondo la clase de amor que existe entre las personas?

Si eres muy honrado contigo mismo, te darás cuenta de que el origen del conflicto reside en la falta de calidad del amor.

Cuando vuestro amor, el de ambas partes, sea generoso y desinteresado, vuestros problemas desaparecerán de inmediato.

Observad con honestidad la calidad de vuestro amor.


Darío Lostado
(Mensajes De Amor)


jueves, 2 de diciembre de 2010

¿ESTÁS TRISTE?



Photo by Guillem.

¿Estás triste?, ¿estás deprimido por algún motivo? Tanto tu tristeza como el motivo que la provoca es irreal, no tienen fuerza en sí mismo.

Por tanto no te inquietes ni intentes consolarte con ideas optimistas o reconfortantes. Mira tu tristeza, mira tu depresión y date cuenta que es una simple nube oscura que atraviesa el cielo de tu alma. Podrá ser más o menos duradera, pero pasará. Tú eres el sol detrás de la nube.

No disimules ni te ocultes tu tristeza. Reconócela y acéptala, pero date cuenta que es pasajera y detrás de ella está la luz y la paz.

Cualquier problema humano contemplado como lo que es como un sueño transitorio y efímero, pierde toda su carga de dolor y sufrimiento.


Darío Lostado
(Mensajes De Verdad)



domingo, 28 de noviembre de 2010

QUE BUSCAMOS


Este no es un ensayo literario, ni filosófico, ni psicológico, ni científico.
Este es un ensayo vivo, vivencial.
Es un esfuerzo o un intento de buscar la Verdad. Pero no la verdad científica sobre algo, ni la verdad abstracta metafísica.
Es la señalización del camino para encontrar la Verdad de sí mismo, en sí mismo.
¿Dónde podría, si no, buscarse y encontrarse la Verdad de sí mismo sino donde ella está?
Pero hay un grave obstáculo ya de entrada y es que creemos que somos lo que no somos. Es necesario identificar con claridad al sí mismo. Es necesario desenmascarar al falso "Yo" que creemos ser.
Y lo que creemos ser es muy deficiente, muy negativo, por más que nos pasemos la vida tratando de demostrar que somos una maravilla. Pero como en nuestro interior nos creemos poca cosa, huimos de nosotros mismos Aunque la Verdad es muy distinta de lo que creemos.
Puesto que vamos a hablar en este ensayo sobre la Verdad más importante para cada uno de nosotros, yo debo también decir la verdad sobre el motivo de escribir estas páginas.
Todavçia no estoy muy seguro de haber elegido la decisión correcta al escribirlas. Me da la impresión de que me ha ocurrido lo mismo que le sucede a quien ha recibido una gran noticia o ha tenido una intuición o experiencia luminosa y tiene prisa en contarla a otros. No puede guardársela para sí mismo.
Y justamente por esto es por lo que no estoy seguro de haber obrado correctamente, al ceder al impulso de contar mis intuiciones o experiencias porque en estas situaciones es el ego impaciente el que está tratando de manifestarse. Si es así, quizá dentro de un año o dos, cuando vaya quitando los disfraces de los innumerables "yoes" con que nos solemos disfrazar, podré ver si alguno de ellos estaba moviendo mis dedos para escribir.
Si estoy seguro de algo: quiero compartir la verdad que voy viendo de mí mismo con todos aquellos buscadores sinceros que aman la verdad más que nada y antes que nada y que nadie.
Este libro es para aquellos que tienen como amor, deseo, anhelo y objetivo principalísimo, el más importante y quizá el único, ver la verdad donde ella está. Buscamos la verdad sin condicionamiento alguno por ideas, escuelas o ideologías. Nuestra conciencia es lo suficientemente capaz para hacer la investigación por sí misma.
Está dedicado este libro a todos aquellos que desean sinceramente encontrar la verdad de sí mismos. No importa su ideología, religión o cultura.
He procurado por eso evitar el uso de palabras y expresiones técnicas o en sánscrito que podían ser más expresivas y apropiadas, pero no tan asequibles para algunas personas. He tratado de ser lo más llano posible en todas mis exposiciones. No veo que para decir algo importante o profundo deba usarse un lenguaje rebuscado.
Este no es el típico ensayo de erudición.
Existen muchos ensayos que cumplen todas las leyes de la investigación con términos y fraseologías muy técnicas y especializadas, solamente asequibles para los especialistas en la materia. Al leerlos uno queda con la impresión de que su autor es culto e instruido. Pero el contenido es como una nebulosa irresoluble e ininteligible. Al final uno se pregunta: ¿qué enseñanza útil me ha aportado para mi vida? A veces el aporte es una mayor confusión intelectual.
Estas páginas no quieren ser eso. No pretenden ser un escaparate de erudición sino que quieren por el contrario, ser un a ayuda orientadora para el hombre de la calle con alguna demanda y aspiración interior de encontrar un sentido a su vida, de conocer cuál es el sentido de su existencia, quién es él mismo y qué razón hay para estar aquí en el mundo con todos los avatares y problemas de la existencia.
En todas mis páginas trato de repetir la misma melodía en distintas tonalidades.
Trato de insinuar que todos nuestros problemas tienen un origen y causa básica común y en consecuencia la solución de todos esos problemas también tienen un mismo denominador común.
Este ensayo tiene intención de utilidad práctica. Intenta ayudar a VER, intenta ayudar a SER, a que cada persona vea lo que es y sea y viva lo que ES.
Después de eso la persona podrá jugar los juegos sociales, científicos, artísticos, políticos..., con su inquieta y agitada mente, como determine jugarlos. Pero los jugará sabiendo que son juegos.
Todos esos juegos deben jugarse después que el problema básico está resuelto. Porque de otro modo esos juegos se convierten en pequeñas o grandes batallas, con momentáneos y eventuales vencedores y vencidos, cambiantes tiranos y tiranizados que van creando uno tras otro los problemas que luego paradójicamente se intentan resolver por los mismos que los provocaron.
Así quedamos encerrados en un círculo vicioso, en el eterno tejer y destejer de Penélope.
Si se resuelve el problema básico de nuestra vida, es decir, si tenemos conciencia y comprensión práctica de lo que somos y son los demás, los juegos que juguemos en la vida no serán una eterna competencia y constantes luchas entre rivales sino que serán juegos del propio desarrollo.
No pienso en un quimérico mundo feliz total.
Pienso en los pequeños mundos felices de las personas que decidan vivir la Verdad de sí mismos.
El mundo total está compuesto de estos pequeños mundos personales.
Yo creo en la armonía, claridad, lucidez, paz, desarrollo y felicidad del pequeño mundo interior de la persona

Photo by Guillem.


Creo también en la influencia eficaz y silenciosa de esas persona lúcidas y luminosas que no figuran en los primeros puestos de la sociedad, que no aparecen en los medios de comunicación, que no son tenidas en cuenta, desconocidas y a veces menospreciadas, que viven y mueren, que aparecen y desaparecen como estrellas luminosas en el firmamento de la Humanidad.
Creo en estas vidas mucho más que en los altisonantes discursos de los políticos de turno y el activismo frenético de los socialmente triunfadores.
Este ensayo no es ni puede ser un ensayo científico, porque aunque algunos hablen de la ciencia del conocimiento de sí mismos, ese conocimiento y esa investigación no es científica. El conocimiento, la investigación y la experiencia de sí mismo es Sabiduría.
La ciencia es deductiva o inductiva. Es discursiva.
La Sabiduría es intuitiva inmediata y directa. Sin deducciones ni discursos, hasta sin palabras ni conceptos en sí misma, aunque se usen las palabras y conceptos para comunicarla y expresarla de alguna manera.
En La Sabiduría SE VE.
En la ciencia se juzga, se deduce e induce y se razona.
En la Sabiduría hay luz, inteligencia intuitiva directa.
En la ciencia hay juicios y razonamientos verdaderos y erróneos. No siempre hay luz. Y muchas veces cambios y contradicciones.
En La Sabiduría se conoce al sujeto que conoce.
En las ciencias se conocen objetos y situaciones objetivas.
La Sabiduría es conocimiento de la Causa primera.
Las ciencias son acerca de los efectos.
La Sabiduría es de Lo invisible.
Las ciencias de lo palpable y sensible.
La Sabiduría es de La Realidad esencial.
Las ciencias, de las formas accidentales.
La Sabiduría es de La Realidad que sustenta.
Las ciencias son de lo sustentado.
Como se ve no siempre van unidas La Sabiduría y la ciencia.
Hay sabios cultos y sabios incultos, como hay científicos sabios y científicos no sabios.
La Sabiduría no requiere conglomerados de conocimientos.
La Sabiduría es el conocimiento de lo simple. Siempre lo más perfecto es lo más simple.
Nuestro Ser, el Ser, la base de todo, objeto de nuestra investigación es lo más simple, lo invisible, base y causa de todo lo visible.




Darío Lostado
(Hacia La Verdad De Ti Mismo)




viernes, 26 de noviembre de 2010

¿QUÉ VALORAMOS?


Al mirar nuestro mundo, vemos que más de mil millones de personas pasan hambre, vemos que millones están atormentados por las guerras, vemos que muchos son esclavizados y vejados por algunos que ostentan más poder y los someten a sus caprichos y ambiciones.
Vemos también con qué frenesí se codicia y anhela el dinero como instrumento de poder, mientras oímos casi con incredulidad y como una lección utópica y lejana aquella bendición: "¡Felices los pobres...!"
¿No será un terrible y maléfico lastre para ser feliz esa ambición desordenada de tener más y más, y que reduce a una inhumana esclavitud a quienes son víctimas de una desenfrenada y ridícula avaricia?
Todo aquello que es innecesario se convierte en un obstáculo para subir la montaña de la bienaventuranza.
Tratamos de justificarnos siempre pensando que tales y cuales cosas son necesarias y así seguimos con el lastre a cuestas, sin permitirnos subir la montaña.
Nada es malo hasta que algo nos tiraniza. Y las riquezas innecesarias suelen esclavizar. Nos lo dice la experiencia diaria. Basta con observar a las personas que van teniendo día a día más dinero, cómo se hacen más avaras cuanto más poseen. Entonces el dinero, que en sí es bueno, se convierte en un lastre, un estorbo para la felicidad.


Darío Lostado
(Despertar A La Conciencia Día A Día)

miércoles, 24 de noviembre de 2010

LO INESTABLE


Un punto de reflexión que debiera ser muy frecuente o quizás constante para cada uno de nosotros es la inestabilidad de todo lo espacio-temporal.
Cada día podemos observar la rapidez con que se dan los cambios en nuestra existencia humana.
Lo agradable, como lo desagradable, pasa con inexorable rapidez.
Psicológicamente, lo desagradable se nos aparece como más largo y duradero que lo agradable, pero lo uno y lo otro son igualmente fugaces.
Damos demasiada importancia a los acontecimientos existenciales porque nos identificamos con ellos, nos sentimos UNO con ellos. Ése es un gran error.
Cada uno de nosotros es algo permanente, el testigo imperturbable de cuanto acontece.
Si estuviéramos identificados con ésta, nuestra Realidad invariable y eterna que es la auténtica Verdad de nosotros veríamos como más evidente la fugacidad y transitoriedad de todo lo existencial.
¿Por qué sufrir y preocuparnos tanto por lo que pasa tan rápida e inexorablemente cada día?
Medita, reflexiona en la fugacidad de los hechos de la historia, de tu historia, y comprobarás que no tienes motivo para las preocupaciones.


Darío Lostado
(Despertar A La Conciencia Día A Día)


domingo, 21 de noviembre de 2010

TRANSMITIENDO PAZ



En la vida diaria nos encontramos con muchas personas ansiosas, tensas, inquietas, atormentadas, sin paz. Por el contrario, no son muchas las que trasparentan, traslucen e inspiran paz en sus rostros y su vida. Algunas tienen una cierta serenidad exterior, tranquilidad aparente.

Pero mi voz me dice:

La paz solamente la pueden traslucir exteriormente los que la poseen interiormente. Y sólo la viven en su interior quienes están en armonía consigo mismo. Y tienen armonía interior quienes en la vida práctica y concreta de cada momento son conscientes de su ser interno, de su naturaleza esencial. Entonces y sólo entonces desaparecen los deseos ansiosos y ambiciones envidiosas de posesión porque saben y se sienten poseedores de todo cuanto de bueno pueden desear. Entonces y sólo entonces desaparecen los deseos ansiosos y ambiciones envidiosas de posesión porque saben y se sienten poseedores de todo cuanto de bueno pueden desear. Entonces desaparecen los miedos porque se ve que LO QUE UNO ES, no se puede perder ni nadie lo puede quitar. Entonces desaparecen los estados de malhumor y enfado porque se ve que no vale la pena enfadarse por nada pues los motivos de los enfados se ven como lo que son, baladíes, sin fundamento, insubstanciales.


Cuando uno toma clara consciencia de sí y ve que casi nada, por no decir nada de lo que le quita la paz es importante, entonces las inquietudes e intranquilidades cesan por sí mismas. Cuando el malestar e inquietud no desaparecen se debe a que la consciencia de sí mismo es débil e imperfecta. Es un termómetro que no falla. A mayor consciencia de sí, más paz y menos inquietudes y ansiedades. A menos consciencia de sí, más y mayores ansiosas tensiones y altibajos de ánimo.
¿Para qué buscar explicaciones complicadas si la verdadera explicación es simple?


Darío Lostado
(...Pero Mi Voz Me Dice...)


viernes, 19 de noviembre de 2010

AMOR AUTÉNTICO


Es muy gozoso
sentir que alguien te ama
con auténtico amor de amistad.
Es muy gozoso saber
que hay alguien que está
a tu disposición,
sin poseerlo y sin ser poseído por él
con amor puro,
con amor desinteresado.
Si le amas para que te ame,
si te ama para que le ames,
si quiere coartar tu libertad
o tú le impides ser libre,
se convierte el amor
en manipulación.
Ese mal llamado amor
nunca llenará de gozo tu alma.
Obsérvalo en ti
obsérvalo también en los demás.



Darío Lostado
(Mensajes De Alegría)


lunes, 15 de noviembre de 2010

MI MUNDO


Yo no estoy en el mundo.
El mundo está en mí.
Todo lo que conozco y vivo del mundo lo conozco y vivo en tanto y en cuanto está en mi conciencia.
Ese mundo que ven mis ojos está ahí, fuera. Pero el mundo que yo conozco, siento, juzgo, valoro, comprendo, el mundo que me da gusto o disgusto, gozo o dolor, ese mundo no es el que está fuera de mí sino dentro de mí, en mi conciencia. Y es tal como está en ella.
El mundo que yo critico, amo, alabo o detesto es el mundo tal como está en mi conciencia.
Mi cuerpo está en el mundo, pero el mundo y mi cuerpo con él están en mí, en mi conciencia.
Mi conciencia es la creadora de mi mundo. No hay ningún mundo para mí fuera de mi.
"Mi" mundo no es el entorno en el que vivo, sino todo el mundo que conozco e imagino. Es el único mundo que existe para mí. No hay otro. Incluso el que pienso que hay en las mentes y las conciencias de otros es mío, en tanto lo pienso y está en mi conciencia


Darío Lostado
(Despertar A La Conciencia Día A Día)


sábado, 13 de noviembre de 2010

LIBÉRATE DE LOS CONFLICTOS


Todos los conflictos que el ser humano tiene en su existencia son producto de algún tipo de ignorancia. Sobre todo la ignorancia de su verdadero ser real.

Los conflictos son:

*de la persona consigo misma
*con los demás

Los conflictos consigo mismo son o los referentes a su cuerpo físico o los originados en su mente.
Los conflictos físicos de nuestro cuerpo se refieren a las deficiencias y anomalías propias de todo ser viviente, por sus normales cambios naturales.
La inconsciencia nos conduce muchas veces a querer detener, cristalizar, la evolución natural de nuestro cuerpo que sigue la ley general de todo ser vivo como es la entropía, por la que se rige, con el nacimiento, crecimiento y decadencia lógica con sus deficiencias y molestias consiguientes.
Si somos conscientes de la impermanencia de todas formas de la existencia, hemos de ser consecuentes con los ciclos naturales de todo ser vivo, entre los que están el decaimiento y decrepitud, salud y enfermedad.
La no aceptación de estos ciclos y cambios naturales nos conduce al conflicto en forma de rechazo. Y cuanto más nos resistimos a aceptar esta ley de la impermanencia y cambio, más dolor y sufrimiento creamos.
Hemos de aceptar que todas las formas de nuestro cuerpo son cambiantes e impermanentes con sus consecuencias. ¿Por qué no aceptar de buen grado la ley tal como es? ¿Por qué no permitir fluir La Vida en todas sus formas según su naturaleza?

Los conflictos mentales son más y de peores consecuencias.
Estos conflictos de la persona consigo misma se crean por la oposición y divergencia entre los deseos egotélicos y raquíticos del yo personal, por una parte, que siempre anhela su provecho particular y, por otra, las aspiraciones profundas de nuestro ser real verdadero, que aspira a la plenitud total.
Esta aspiración profunda está siempre presente aun en aquellas personas que parecen embebidas y cegadas por los deseos más sensuales. En el fondo de todo ser humano hay una exigencia a la plenitud total, aunque muchos traten de ignorarla o negarla.
Pablo de Tarso decía: "Veo lo que es mejor y lo apruebo, pero en cambio sigo lo peor". La luz interior de su ser lo empujaba hacia arriba, pero la esclavitud de su yo personal lo arrastraba hacia abajo.
Además del yo personal existe un yo colectivo de la Humanidad, arraigado por los hábitos mentales erróneos de miles y miles de años.
Hace 2.600 años, Buda ya dijo que la vida humana está marcada por la insatisfacción y el sufrimiento. Y todo sufrimiento tiene su origen en los constantes deseos del yo personal del hombre. Si este se situara en su verdadero ser real, los deseos indebidos y esclavizantes no se darían porque el ser real no necesita nada, pues es Todo y es plenitud.
Todos estamos llamados a vivir desde ese YO Real que no necesita tantas cosas como las que nuestro yo personal exige, pero son pocos los que se lanzan a la feliz y noble aventura de conocerlo y vivirlo como lo más importante de nuestra existencia.


La vida moderna está organizada sobre la exaltación de los egos o yoes personales y desconociendo la naturaleza dichosa y plena de nuestro verdadero ser real.
A ese yo personal tan complejo e inestable es normal que le surjan conflictos sin fin. Lo sabemos todos, por propia experiencia.

Nuestro trabajo principal, el de esas tantas personas que dicen que buscan su desarrollo o crecimiento personal, debe consistir en llegar a comprender y desenmascarar con toda claridad esa falsedad permanente en la que estamos sumidos, creyendo y viviendo como si fuéramos algo que realmente no somos.

A quien crea que estoy repitiendo con insistencia algo que ya he dicho varias veces, les aconsejo que no se engañen y no se anden por las ramas. Si consiguen tener una clara comprensión de esto, no necesitarán andas buscando técnicas y métodos para mejorar su vida.
No se trata de un conocimiento teórico e intelectual sino operativo y eficaz. Debe haber una convicción clara y taxativa de esta simple verdad. Yo no soy el yo personal que creo ser.
El yo personal es una estructura mental vulnerable e inestable. Mientras una persona esté dependiendo de tal falsedad, los conflictos serán interminables. De modo que es necesario salir de esa dirección errónea de nuestra vida.
La pregunta que se hacen muchas personas es sencilla: Observando, observando y observando en cada momento del día: ¿quién está hablando?, ¿quién trabaja?, ¿quién sufre?, ¿quién se alegra?, ¿quién ama?, ¿quién se enoja?...
Al darnos cuenta de que estamos constantemente pivotando sobre una entidad mental que llamo yo pero que no tiene entidad alguna más que en mi mente, llegaremos a darnos cuenta de que en nosotros hay algo mucho más estable y básico. Así nos acercaremos a intuir la realidad del ser real que somos.
Esa intuición, que es la verdad de nosotros, llega cuando hay un deseo muy sincero y profundo de conocer y sentir esa Verdad.
El proceso interminable que se forma con la acción del yo personal es: genera deseos ilusorios - desilusiones - más deseo - más desilusiones - insatisfacción - inquietud...

Los conflictos en la relación con los demás tienen también su causa y origen en este yo personal del que estamos hablando.
En realidad, la vida social viene a ser una permanente lucha de egos o yoes personales. Cada una quiere imponerse al otro. Y cada uno intenta afirmarse sobre el otro. La lucha es inevitable.
Las envidias, los celos, los enfados, los desencuentros y desamores, la venganza, el odio, el desprecio, la indiferencia despectiva... todas las formas de una deficiente o mala relación personal tienen su causa y origen en el predominio del yo personal sobre el Yo Real de cada uno.
No nos engañemos y descubramos el origen de nuestros conflictos.


Darío Lostado
(Atrévete A Ser Libre)


miércoles, 10 de noviembre de 2010

¿QUÉ TENGO QUE HACER AHORA?


Se cuenta en una historia sufí que iba un día Moisés a ver a Dios para preguntarle cuál era el futuro trabajo que le encomendaba.

En el camino se encontró con un pobre, quien al saber que iba a ver a Dios, le rogó que preguntase de su parte cómo podía mejorar su condición de pobreza.

Más adelante se encontró con un hombre rico, que le dijo: "Dile a Dios qué debo hacer con mis riquezas porque cada día Él me bendice más y más".

Moisés llegó a Dios y le dijo: "Señor, vengo para que me digas cuál es mi trabajo futuro y al mismo tiempo, quiero pedirte por los dos hombres que encontré en el camino".

Dios le contestó: "Me preguntas qué debes hacer y en cambio no has hecho en el camino lo que era justo y era lo que tenías que hacer. Debías haber hecho que el rico diera al pobre lo que le sobraba y era justo que le diera. ¿Cómo te voy a decir lo que tienes que hacer después, si no haces ahora lo que te corresponde?"




No es difícil saber lo que tenemos que hacer en cada momento. La conciencia interna lo dice claramente a quien está atento a su voz.

¿Para qué estar proyectando lo que vamos a hacer en el futuro si no hacemos AHORA lo que nos corresponde?


Darío Lostado
(Atrevete A Ser Libre)


lunes, 8 de noviembre de 2010

CUANDO TODO MUERE VIVE EL AMOR


Miro la vida en mí, en los que me rodean.
Las euforias y vítores de la victoria y triunfos, las alegrías de las fiestas, como los oscuros y tristes días de luto9 y amargura de los sucesos dolorosos y trágicos, todo desaparece engullido por el tiempo.
Sólo uno cosa queda y permanece siempre viva, como el sol eternamente naciente.
Sólo uno cosa queda y permanece: Lo que Es,Lo que siempre es, y es principio y causa de todo lo que existe: El Amor.
Este amor no sólo es permanente y eterno en EL QUE ES, porque El es el Amor, sino en tí que también eres amor.




Cuando las olas bravías rugen y braman,
sosiega y amansa pacífico el amor.
Cuando el odio muerde y destruye,
besa, construye y crea el amor.

Cuando la pasión ciega y oscurece,
clarea y da luz el amor.

Cuando el egoísmo ruin mata, vivifica generoso el amor.
Cuando los cañones truenan,
canta el amor.

Cuando la ambición pisotea y deshumaniza,
acaricia y cuida con mimos el amor.

Cuando la desesperación anquilosa, deprime y agobia,
da alas a la ilusión el amor.


Cuando la tiranía esclaviza,
libera gozoso y comprensivo el amor.

Cuando el temor paraliza y hiela,
estimula cálido el amor.

Cuando las guerras estallan y se extienden,
pacífica, calma y serena el amor.

Cuando los pajarillos apagan sus trinos,
suena la canción eterna del amor.

Cuando el dolor tortura el cuerpo y paraliza el alma,
calma, suaviza sana y vivifica el amor.


Cuando el desengaño envejece la ilusión,
estimula y rejuvenece el amor.

Cuando todo falta,
queda el amor.

Cuando todo muere,
vive el amor.

Cuando todo calla,
habla el amor.

Cuando todos te abandonan,
te acompaña el amor.

Cuando todo llora,
canta el amor.

Siempre,
en todo,
en todos,
a pesar de todo,
a pesar de todos,

VIVE EL AMOR, ESTÁ PRESENTE EL AMOR.


Darío Lostado
(Ama Y Haz Lo Que Quieras)


miércoles, 3 de noviembre de 2010

YO FALSO - YO VERDADERO


Decía uno: ¡por qué dar tanta importancia el conocimiento de sí mismo, cuando hay que hacer tantas cosas por mejorar el mundo y servir a los que nos necesitan?

Pero mi voz me dice:

Cuando deseas hacer algo por el mundo o servir a los demás, debes saber quién es el que desea. Porque en tí hay muchos "yoes" falsos y uno solo verdadero. He dicho muchos yoes falsos, pero en realidad solamente hay un yo falso, que es el "ego" disfrazado con muchas caretas o ropajes.

Unos quieren servir porque su yo religioso quiere conseguir el cielo. Otros porque su yo político quiere construirse una plataforma para las elecciones. Otros, porque su yo social quiere sentirse solidario y ciudadano responsable. Otros, por sentir la satisfacción de servir. En estos casos y otros semejantes el que dice o intenta servir, no sirve a los demás sino a su eglolátrico "ego" que se sirve de ese supuesto y aparente servicio generoso, para su autocomplacencia y diverso interés egoísta.

Puedes observar cuántas organizaciones llamadas altruistas o caritativas hay en el mundo y el gasto de personas y recursos que conllevan. Verás que los resultados no son proporcionales a tales estructuras. Y la explicación reside en que dichas estructuras no están entramadas en su mayor parte por "yoes" generosos sino por "yoes" egoístas, interesados y autocomplacientes.

Si esas personas y organizaciones que dicen trabajar por los demás, partieran del conocimiento vivencial del verdadero "yo", de su ser profundo, la eficacia sería otra muy distinta.

Compruébalo por ti mismo. Date cuenta de quién eres y de lo que eres y verás que cada instante de tu actuar será muy distinto.


Darío Lostado
(...Pero Mi Voz Me Dice...)


lunes, 1 de noviembre de 2010

VALORA LO QUE TIENES


Es un joven de veinticuatro años.

Hace poco tiempo, el tren le cortó las dos piernas. La ciencia médica logró reimplantárselas.

Cuando recién daba los primeros pasos, alguien le preguntó cómo se sentía. Y él dijo:

"Me siento la persona más feliz del mundo".


¿Por qué hemos de esperar a perder las cosas, los dones que tenemos, para saber valorarlos?

¿Por qué cada día, cada instante, no nos sentimos contentos y felices con lo que somos y tenemos, si es tan poco lo que necesitamos para vivir y amar profundamente?



Photo by Guillem



Hoy puedes hacer mucho por ti.

Hoy puedes hacer también mucho por los demás.


Si eres consciente de ti y comprendes y amas a los demás, la rutina de tu trabajo diario se convertirá en una nueva y gozosa aventura.


Valora lo que eres, lo que tienes y lo que haces.


Darío Lostado
(Atrévete A Ser Libre)


viernes, 29 de octubre de 2010

PLENITUD


No debes amar a Dios porque así te lo han enseñado.
No debes amar a Dios porque así irás al cielo y te librarás del infierno.
No debes amar a Dios por ningún extraño motivo.

Photo by Guillem.

DEBES AMAR A DIOS PORQUE ÉL ES LA PLENITUD DEL AMOR
y cualquier acto de amor en ti procede siempre de Él y a Él se dirigirá como destino final indefectible.
Tu ser está destinado a la plenitud y Él es La Plenitud.
En la unión con Él tú serás auténticamente lo que estás destinado a ser.
No imagines y fantasees con objetivos o finalidades triviales o vanas que sólo dejan vacío en el alma.
Ser auténticamente tú es tu objetivo esencial.


Darío Lostado
(Mensajes De Amor)


martes, 26 de octubre de 2010

LAS FLORES, EL RÍO Y LA MONTAÑA


Un maestro se fue un día de paseo.
Los discípulos le esperaban para recibir sus enseñanzas.
Al volver de su paseo, un discípulo se le acercó y le dijo:
Maestro, estamos esperándole. ¿Dónde estaba?
Estaba paseando junto al río, dijo el maestro.
He estado hablando con la montaña, con el río y con las flores.
Me han dado su lección.
Me han hablado con su presencia, con su canto, con su olor y color.
Me han estado hablando con su lenguaje sin palabras:
Mis palabras son sólo palabras.
El lenguaje de la montaña, del río y de las flores es el lenguaje de la vida.
Cantan con su vida a La Vida. En su canto siempre está la verdad.
Desde hoy vuestra maestra será la Naturaleza con su canto ingenuo, vivo, transparente, espontáneo y siempre veraz.


Si nuestro espíritu y nuestros ojos fueran sencillos entenderíamos el lenguaje de la naturaleza. Es siempre una sinfonía siempre viva. Pero preferimos lo artificial y rebuscado.
Teniendo ojos no vemos y teniendo oídos no oímos.


Darío Lostado
(Vivir Como Persona)



domingo, 24 de octubre de 2010

VICTIMAS DEL MIEDO



Hay en India una bella y aleccionadora historia.

Estaba un viejo junto a un camino, sentado junto a la sombra de un árbol. Acertó a pasar por allí el espíritu de la peste.

El viejo le preguntó: ¿A dónde vas?

El espíritu de la peste dijo: Voy a Benarés. Tengo la misión de matar a un centenar de personas.

Pasaron unos días y en Benarés murieron miles y miles de personas, víctimas de la peste, según decían las noticias, que se divulgaron y llegaron a oídos del viejo.

Cuando el espíritu de la peste volvía de cumplir su mortífera misión, se encontró nuevamente con el viejo.

Este, le recriminó al espíritu de la peste porque le había mentido: Dijiste que ibas a matar a cien y has matado a miles.

No, no, contestó el espíritu de la peste, yo solamente maté a cien. El miedo mató a los demás.



Miles de veces los estados de ánimo los abandonamos en manos de unas u otras ideas.
Unas ideas provocan miedo y el miedo trastorna el organismo humano y mata.
Dicen muchos: Cambia las ideas negativas en positivas. Vive con ideas positivas y tendrás salud.
Mi voz interior me dice: No vivas de ideas. Vive de tu realidad conocida y sentida por dí mismo. Tu realidad es La Vida.
Ninguna idea sobre la vida te dará más vida que La Vida misma.
No vivas en manos de ninguna idea. Las ideas están en ti. No estés y dependas tú de las ideas.
Si te apoyaras en ti, en tu realidad, y no en ideas no temerías nada ni a nadie. Las ideas de miedo pasarán por el cielo de tu vida. Y las mirarás al pasar como se mira una nubecilla viajera pasear por el sereno cielo azul.
Las ideas van y vienen. Pero muchos las albergan en su alma y se convierten en señores y dueñas de sus vidas.
El miedo, los miedos, todos los miedos son producidos por ideas.
Cambia, si quieres, tus ideas. Pero ante todo cambia lo único que te dará seguridad verdadera en todo momento: cambia tus ideas por tu verdadera realidad. No dejes el timón de tu vida en manos de ninguna idea por bella o positiva que ella parezca. Toma el timón en tus propias manos. Eres tú, es tu realidad, es tu inteligencia, es tu amor, el verdadero dueño de tu vida y de tus sentimientos. Estamos bombardeados por palabras y frases: Ten pensamientos positivos, ten actitud positiva en tu mente, vive de ideas positivas, cambia tus ideas negativas en positivas, etc...
Todo eso está bien. Pero no es lo mejor, porque aunque cambies tu modo de comportarte y tu actitud ante la vida mejore, todo ese cambio es inestable como inestables son las ideas en que se apoya. Empieza a ser persona de verdad siendo tú el único conductor consciente, firme, de tus acciones y de tu vida, apoyando tus pensamientos y sentimientos en lo que nunca cambia: tu realidad, tu SER.
¡No temas! Desecha toda idea de miedo.
Acógete a tu Ser que es el mismo Ser de Dios.


Darío Lostado
(Vivir Como Persona)



viernes, 22 de octubre de 2010

AUTORREALIZACIÓN Y LIBERACIÓN INTERIOR




Las palabras, que suelen ser los vehículos para comunicarnos, muchas veces resultan torpes y son más un estorbo que una ayuda.
Autorrealización etimológica y semánticamente significaría la acción de hacerse realidad por sí mismo.
Bien mirado, la realidad ya es realidad. Siempre ha sido. Por tanto no puede hacerse.
La realidad que yo soy, la he sido y la seré siempre. Aunque me pase toda mi vida existencial-temporal sin darme cuenta de ello.
Lo que queremos expresar normalmente con la palabra "autorrealización" es el llegar a tomar conciencia de la realidad que somos y vivirla. Darme cuenta de la naturaleza de mi realidad y liberarme de los errores con que estoy encarcelado por las ideas que he llegado a formarme sobre mí mismo. Ninguna idea sobre mí mismo es mi realidad.
Por todo esto, autorrealización sería lo mismo que liberación interior.
Sew ha hablado y se habla mucho sobre la liberación de los pueblos de la pobreza, de las opresiones económicas, de las dictaduras, etc... Es un sano empeño y una noble labor. Pero la mayor parte de los hombres y mujeres están tiranizados y sojuzgados por una tiranía mucho más grave, más profundo y más sutil.
La mayor parte de los hombres y mujeres viven esclavizados por la idea que tienen sobre sí mismos. Viven esclavizados por un "yo falso, por el personaje que creen ser o como dirían muchos psicólogos por su "ego".
Lo peor de esta esclavitud es que casi nadie la reconoce en sí mismo.
La mayor parte de las personas prefieren hablar y gritar en favor de la liberación de los pueblos, más que trabajar en la propia liberación. Hablar y levantar pancartas en favor de los pueblos es más fácil, viste más y que da mejor y es más cómodo, que trabajar en descubrir nuestros propios errores y falsedades a los que estamos atados y esclavizados. El trabajo sobre la propia liberación interior es arduo y lento.
Es muy frecuente el caer en el error de estar pendiente y preocupado por el progreso que se va haciendo, en el trabajo sobre el mejoramiento de sí mismo.
Cada vez que estamos pendientes de si progresamos o no, es claro que no estamos en el camino verdadero de nuestro propio descubrimiento y liberación.
El que se aligra o entristece que lo que parece progreso o retroceso es el "yo" falso.
No te preocupes más que de ser consciente en todo momento de que eres tú el que estás presente aquí y ahora, en cada cosa, en cada situación.
El intento por estar presente con toda tu conciencia en cada momento y en cada cosa es ya un paso adelante.
No te preocupes si adelantas o no. Ese podría ser el primero de tus autoengaños en el camino hacia ti mismo.
Sólo intenta ser tu quien pone el pie una y otra vez en el camino de tu vida.
Autorrealización o realización personal es lo mismo que liberación. No es liberarnos de algo extraño a nosotros. Es liberarnos de la cárcel que nos hemos construído y en la que vivimos, esclavizados a una idea falsa de nosotros mismos.
Mientras no descubramos que estamos viviendo encarcelados, jamás podremos liberarnos.
Mientras vivimos ese mundo ficticio, creyendo que es real, nunca podremos disfrutar de la dicha de la verdadera libertad.


Cuando hablemos de la libertad, estaremos hablando de una libertad parcial, mediocre, ilusoria.
Mientras no salgamos de nuestro error y veamos claramente la verdad, difícilmente haremos nada efectivo de cara a nuestra verdadera liberación interna.
Nadie se liberará mientras viva erróneamente creyendo ser libre.
Y lo peor es que nadie podría liberarlo mientras él mismo no se dé cuenta y reconozca su error, y se dé cuenta que vive encarcelado.
Para eso es necesario darse cuenta del autoengaño en que está viviendo.
Un requisito indispensable para empezar a trabajar en la propia realización o liberación, es ser sincero consigo mismo, querer ver la verdad sobre nosotros mismos sea cual sea esa verdad. Aunque nos dé vergüenza, aunque nos parezca extraña, aunque nos parezca absurda.
Nos parece absurda la verdad de que vivimos en una prisión, en una cárcel porque la hemos ido construyendo nosotros mismos. Quizás en un principio lo hicimos como en juego, jugando con ilusiones, jugando con sueños.
Poco a poco fue transformándose en habitual. Y el sueño, el juego, llegamos a creerlo real. Vivimos el sueño como realidad.
Sólo llegará nuestra liberación cuando descubramos nuestro autoengaño y reconozcamos la realidad más allá de la ficción y del sueño.
No son muchos los que tienen valentía, claridad y coraje para reconocer la mentira, la locura, la falsedad y el error en que vivimos, cuando damos consistencia a valores que sólo son producto de una fugaz, transitoria e inconsistente idea de la mente, sin realidad alguna.
Nuestro error principal ha consistido en aferrarnos a ciertas ideas como si ellas fueran nuestro apoyo y sostén, cuando en realidad se han convertido en los barrotes de la cárcel en la que hemos vivido y estamos viviendo prisioneros.
Vivimos de ideas y no de realidades.
Vivimos de la idea que nos hemos formado sobre nosotros. Y nosotros no somos esa idea. Somos una realidad mucho más importante y consistente que esa idea. Pero la desconocemos porque nunca nos hemos puesto a mirarla cara a cara y a sentirla directamente.
Vivimos de las ideas que nos hemos formado de los demás. Los demás tampoco son esas ideas que tenemos sobre ellos.
Vivimos de las ideas de las cosas y las cosas tampoco son esas ideas.
Vivimos en un sueño, en una ficción.
La realidad es otra muy distinta. La realidad no puede "decirse". Cuando se dice ya se convierte en ideas.
La realidad sólo puede vivirse.
Hemos confundido lo real con lo ideal, lo permanente con lo transitorio, el sueño con la realidad.
Es necesaria mucha valentía para reconocer que eso a lo que hemos dado tanta importancia en tantos momentos de nuestra vida, con lo que hemos estado tan identificados en tal grado que hemos llegado a creer que somos éso, es necesaria, repito, tal valentía para reconocer nuestro error, que preferimos muchas veces seguir viviendo en el sueño y el error.
Sólo con una sinceridad profunda llegaremos a reconocerlo y aceptarlo.
Es de tal importancia este reconocimiento, que puede ocurrir que me vaya formando una nueva idea falsa dentro de mi cárcel de ideas, sobre mi propia liberación. Y seguirá el ciclo de autoengaño una y otra vez. Esta vez será el autoengaño de mi liberación.
La libertad es una palabra y un concepto engañoso.
La mayor parte de las personas piensan que son o serán libres cuando puedan hablar lo qué y cuando deseen, ir a donde deseen, hacer y comprar lo que deseen... Y viven tras esa vana, lastimosa y errónea ilusión.
Existe un tirano déspota, un dictador cruel que nos gobierna habitualmente sin apenas fuerza de oposición.
Es un tirano difícil de desenmascarar porque lo hemos ido creando poco a poco nosotros mismos y nos dirige y esclaviza con una extraordinaria y casi imperceptible sutileza.
Es un tirano que nos gobierna haciéndonos creer que somos nosotros mismos los que llevamos las riendas de nuestra vida. Pero no. En realidad no somos nosotros.
Nuestro verdadero "yo" sigue amordazado en las mazmorras del error, dormido y abandonado en las manos de unas caprichosas marionetas vanidosas que no son sino las manos, pies y ojos de nuestro egocéntrico, superficial, caprichoso, miedoso, pobre y engañoso "ego" o "yo" falso, que ha suplantado a nuestro verdadero "Yo" y ha llegado a creerse, nos hemos llegado a creer que es el verdadero dueño y señor de nuestra casa, de nuestra vida.
Y así continúa el juego del engaño.
Pero además, como vemos junto a nosotros, cada día miles y miles de personas en el mismo engañoso juego, todavía nos afianzamos más en nuestro error porque llegamos a creer que eso es lo que tiene que ser porque los demás también son así.
Todavía el mal se agrava cuando vemos que los que detentan el poder político, económico, cultural y hasta el religioso también están metidos en el mismo juego.
Ante la fuerza moral de tan "importantes" personas, cuando vislumbramos la lucecita de la verdad que nos ilumina interiormente llegan a surgir las dudas: ¿estaré yo en el error?, ¿no seré yo un loco pretendiendo algo tan distinto de todos? ¿por qué no soy yo como los demás?...
Ante estas y otrtas semejantes razones solemos capitular y acallamos cobardemente nuestra demanda interior una y otra vez.
Pensamos que hemos de ir casi siempre contra corriente, que seremos tenidos por raros y locos. Los más generosos nos llamarán ilusos, idealistas.
Nuestro egolátrico y caprichoso dictadorcillo "ego" nos da un contundente discurso diciéndonos que estamos locos si queremos ser honrados en un mundo egoísta e injusto, que no queramos enfentarnos contra el mundo porque no conseguiremos nada, que somos unos soñadores idealistas si creemos que la verdad y el amor pueden vencer en un mundo de hipocresía, falso amor, ambición y odio.
Y realmente parte de eso es verdad. Y lo admitimos como si eso fuera todo verdad, toda la verdad. Pero aunque mucho de eso es verdad, no es toda la verdad.
Es verdad que domina la hipocresía, la ambición el desamor y el odio en gran parte de la gente.
Esta actitud de ambición, hipocresía, injusticia... tiene una importancia y trascencencia especial cuando se da y se observa en las personas que detentan los distintos poderes de la sociedad y en los medios de comunicación social.
Tienen una fuerza especial de convicción y arrastre negativo, las actitudes y ejemplos de aquellas personas que de una u otra forma son los dirigentes y representantes de organizaciones humanitarias, altruistas, educativas... porque ellos aparentemente por la finalidad de sus trabajos y empresas debieran estar libres de la ambición del poder, el dinero, la gloria y la fama. Y los hechos dicen lo contrario.
Mientras miramos y vemos todo ese entorno nuestro gobernado y dirigido por la ambición y egoismo de nuestro falso "yo", y vemos que los que gobiernan y pesan en la sociedad viven con estas pautas y estos valores, sentimos la tentación de abandonar el trabajo para vivir libres de las esclavitudes de nuestro falso "yo".
Pero la demanda interior urge desde el fondo de nosotros mismos.
Cuando uno está atento y sensible a la voz interior y mantiene el deseo sincero por la verdad, llega a derse cuenta que, por el hecho de que la mayoría de los hombres por muy encumbrados que estén en la sociedad, vivan esclavizados al dictadorcillo egolátrico de su "ego", No la constituye en el verdadero señor nuestro.
Ese falso "yo" sigue siendo un impostor.
Nuestro mundo, nuestro verdadero mundo personal será libre cuando quitemos la máscara y rasguemos los ropajes de ese impostor reyezuelo que ha llegado a entronizarse en nuestra vida.
Aunque el mundo entero siga bajo las órdenes de miles y millones de dictadorcillos, nosotros, cada una, el que quiera de verdad, podrá ser libre, con la verdadera libertad interior, la principal, la mejor libertad.


Nuestro despertar no será solitario y único, aunque así pueda parecerlo.
No seremos aplaudidos ni vitoreados ni8 siquiera reconocidos y aceptados por la mayoría que sigan esclavos. Incluso seremos tenidos por ilusos y locos. Pero nos sentiremos libres del juicio y opinión de los demás y nuestra verdadera libertad interior será luz en el mundo.


Darío Lostado
(Ama Y Haz Lo Que Quieras)