Nadie duda de que el Amor ocupa el centro de la vida en todos los seres humanos.
Sea amor inferior o superior, siempre el Amor a algo es lo más importante hasta para las personas más metalizadas, para quienes parece que sólo existiera el dinero.
Todos, en una medida u otra, amamos algo, tendemos hacia algo muy deseado y anhelado.
No hay un ser humano que no viva con amor, por amor y para el Amor.
El Amor debería llenarnos de gozo y cordialidad.
¿Por qué no ocurre así? Porque el amor que predomina en el corazón humano es un amor a nivel inferior, un amor egocentrado. Y este amor acarrea más desilusión y vacío que alegría y paz.
Al considerarnos como individualidades autónomas, separadas, nos vemos enfrentados a los otros, a los que consideramos al menos como rivales que desean conseguir las mismas cosas que nosotros. Por eso estamos siempre en guardia y en pie de guerra.
Solamente cuando amamos con el sentido de unidad que es el Amor Verdadero, vemos al otro en nosotros y nos vemos a nosotros en él.
No vivimos dichosos porque amamos poco y mal.
En el Amor Verdadero, yo soy tú y tú eres yo, en nuestro Ser Verdadero.
Darío Lostado
(Despertar A La Conciencia Día A Día)
Qué maravilla, gracias Guillem! Por su sencillez va directo al corazón, gracias Dario!
ResponderEliminarEl único amor verdadero, aquel eterno y en todo lo manifestado, no pide nada a cambio, y no piensa en "espíritu de provecho"
ResponderEliminarGracias por la joyita!!